domingo, 24 de mayo de 2009

Mi experiencia en el Salón del Cómic. Lo mejor y algunas objecciones

Gracias a Neil Young y el Primavera Sound sumé una razón más para ir a Barcelona al Salón del Comic. Lo que más me gustó de estos tres días fue la simpatía de los autores, nada engreídos y muy afables, desde los que tenían mucha cola para firmar a los que estaban deseando que pasara un amigo para dedicarles un dibujo. Cruzar un saludo, un comentario de reconocimiento o ánimo con los autores de cómics que has pasado tiempo leyendo es muy agradable, y ver cómo te hacen dibujo con cariño o profesionalidad, según el estilo de cada uno...

Otra cosa positiva es constatar la enorme cantidad de títulos disponibles, aunque resulta casi apabullante. Las editoriales están queriendo alimentar el crecimiento de interés por los cómics con una oferta que abruma a cualquier aficionado, sobre todo porque hay otras muchas cosas que hacer, leer, escuchar o escribir…

También da gusto ver tanta gente en el Salón: desde niños a ancianos, gente alternativa o convencional, unidos por el gusto por los cómics y lo que le rodea, que es algo muy variado también: desde exposiciones a videojuegos, maquillaje, merchandising, cromos, talleres de serigrafía o el gusto por disfrazarse y actuar. El cómic se está mostrando algo diverso y transgeneracional, y aunque no se si podemos hablar de "nueva era" como se hacía en Babelia este sábado, indudablemente es un mundo en crecimiento acelerado.

Igualmente disfruté al poder conocer proyectos, saber de las próximas publicaciones de alguna de mis editoriales favoritas, como Ponent Mon, observar los gustos de otros lectores y comprobar el apoyo institucional de algunas autonomías a la edición de comics y sus autores, con magníficos stands. En particular, Galicia y Baleares los tenían estupendos, y el de Murcia fue muy activo: desde sesiones de maquilaje, firmas, regalo de chapas de Murcia Attacks! y de la “Brújula de tebeos” que ya hemos reseñado, a degustaciones de hueva y mojama mientras se difundía las próximas Jornadas de manga en Murcia… Somos así de generosos.

Entre las pequeñas observaciones críticas que se pueden hacer, algunas tienen que ver con la organización:
  • El pabellón donde se celebra está muy cutre, con una iluminación blanquecina, un suelo sucio y deteriorado, un ambiente caluroso y húmero por la falta de refrigeración en los espacios comunes… Dice poco de un recinto ferial como Fira Barcelona, creo yo. Muy diferente a cuando he asistido a Liber u otras Ferias.
  • Y sin wifi abierta para el público, como en cualquier evento que se precie. En el actual contexto de redes participativas y vida conectada, y cuando herramientas como los blogs están haciendo tanto por la afición al cómic, se echa de menos. Escribir notas y publicarlas, usar Twitter o Facebook para expresar opiniones espontáneas o simplemente leer el correo se facilitaría mucho, y también creo que aumentaría un poco la visibilidad del Salón en la web social. Que por otra parte ha sido muy abundante en las semana previas, y durante estos días en la prensa generalista.
  • Otra cosa que creo francamente mejorable es la programación de actos y conferencias: entre lo poco agradable del Salón de conferencias o la carpa prefabricada, el ruido ambiental, y quizás el modelo poco atractivo de realización, no me sedujeron: Ssucesivas presentaciones de novedades casi sin público, descripción de actividades de un modo algo monótono, como pasó en la sesión del grupo Comicteca (pdf del programa) o en la de aspectos pedagógicos de los cómics, no estimulan la participación del público, y los diálogos con autor o las mesas se convierten en monólogos. De los que también se aprende, eso sí.
Me traigo del Salón lectura para varias semanas, y algunas dedicatorias simpáticas: El gran Kim hizo entrar a su Martínez el facha a la biblioteca para leer a José Antonio (Primo de Rivera), Alfonso Zapico puso a tocar el violín en la biblioteca al simpático joven de Café Budapest, Paolo Cossi me dibujó en su emocionante cómic sobre Armenia, La gran catástrofe, y así muchas más, que iremos viendo: Seguí y las Serpientes ciegas, Una oportunidad entre mil de Cristina Durán y Miguel Giner....

Solo me faltó poder conseguir las firmas de Gipi y David B, por más que lo intenté los tres días, por diferencias horarias, el tamaño de las colas… Incluso la amable vendedora de Sins Entido se quedó los ejemplares que había comprado de Epiléptico y Mi vida mal contada para intentarlo, pero no pudo ser, de modo que queda pendiente para otro año.

Mi madre era una mujer hermosa de Karlien de Villiers

Mi madre era una mujer hermosa es un cómic autobiográfico de Karlien de Villiers, que saqué de la biblioteca regional. A través del relato de su infancia, marcada por la decadencia del régimen del apartheid en Suráfrica, el divorcio de sus padres y la muerte de su madre, vamos conociendo la vida y su visión en ese país, y el crecimiento como persona de la autora. Quizás no sea una obra maestra, pero me ha gustado leerlo (Reseña en Tirafrutas).

viernes, 15 de mayo de 2009

Evolución del cómic en la red de bibliotecas de la provincia de Barcelona: Valoración en Cómic Tecla


En Cómic Tecla 28, de la biblioteca central Tecla Sala de L'Hospitalet se valoran los datos sobre cómic en la Xarxa de biblioteques de la provincia de Barcelona, que completan lo que ya analizaron en Cómic Tecla 25, cuando concluían “un espectacular aumento en las cifras de ejemplares y préstamos durante el periodo 2000-2007”. Al tener en cuenta también 2008, siguen observando un crecimiento mucho mayor que el resto de sectores de las bibliotecas: En tan solo un año, la Xarxa ha ingresado un total de 67.769 ejemplares de cómic, lo que supone un incremento del 28,7% (frente al 8% del conjunto global de documentos). La media de ejemplares por biblioteca también ha crecido bastante en 2008 alcanzando los 1.216 ejemplares por biblioteca (y teniendo que cuenta que hablamos de 192 bibliotecas). Este año pasado hubo 50.764 préstamos más de cómics que en 2007. Por eso, David Cuadrado afirma con razón que “que se está produciendo una paulatina pero imparable “integración” del cómic no solo ya en las bibliotecas sino en la vida cultural de nuestro país”. Enhorabuena...

lunes, 11 de mayo de 2009

Burbujas, de Daniel Torres. Historia de una crisis personal

Burbujas, magnificamente escrita y dibujada por Daniel Torres, es la historia de la crisis del protagonista, mediados los cuarenta, que se cuestiona trabajo, pareja, familia y vida. Es algo habitual, pero en este comic se lleva a extremo, llevando a un momento vital crítico. Es lúcido, irónico, autocrítico... a través de una serie de monólogos frente a un acuario. Emocionante, de lectura de un tirón.
En La cárcel de papel la reseña definitiva

Mortadelo y Filemón en la biblioteca

Mortadelo y Filemón han pasado en alguna de sus aventuras por las bibliotecas, dejando ese humor sencillo, disparatado pero a la vez muy vinculado al sentido del humor común.
En el caso que nos ocupa la risa se encuentra a través del desastre (la ruptura del silencio, la caída de las estanterías, el desorden total), el estereotipo llevado al extremo de la bibliotecaria (fealdad, seriedad, rigurosidad...), el desuso...


Dejamos algunas imágenes, tomadas de "La gallina de los huevos de oro" y alguna otra historia, para tengamos más referencias bibliotecarias y nos riamos de nosotros mismos.

sábado, 9 de mayo de 2009

El derrotista: los orígenes de Harvey Pekar y American Splendor

El derrotista, de Harvey Pekar, es un buen cómic, la historia autobiográfica del propio autor, en la etapa previa a American Splendor, que conozco a través de la estupenda película. Sacado en préstamo de la Biblioteca Regional de Murcia, como casi siempre.

Muy sinceramente contada, incluyendo sus limitaciones, obsesiones, sentimientos de inferioridad, y a la vez los esfuerzos por salir adelante no siempre bien encaminados..., pero que le llevaron, por una parte, a trabajar como archivero de historias clínicas de un hospital. Y, por otra, a contar y publicar historias que reflejaban con realismo la vida cotidiana de los trabajadores estadounidenses.


jueves, 7 de mayo de 2009

Brujula para tebeos: Guía de cómic de la Biblioteca Regional de Murcia

Brújula para tebeos (pdf del texto completo) es una guía realizada por la comicteca de la Biblioteca Regional de Murcia, que regalará en el ya cercano Salón del Comic de Barcelona, pero que está ya disponible en la Biblioteca. Con imagen de cubierta de Dani Acuña, contiene una muy buena selección de recomendaciones, agrupadas por géneros y temas, con reseñas de los bibliotecarios Vicente Funes (hoy en las Jornadas de Cómic de CERLALC) y Antonia Hermosilla, textos de Juan Álvarez y Paco Olivares, así como historietas escritas para la ocasión por dibujantes de Murcia como Julia Cejas, J. David Morales y Ascensión López, en los que la biblioteca es protagonista...

Además incluye una ejemplificación de cómo se organiza la comicteca y cómo localizar las secciones, y por todo me ha parecido un trabajo sobresaliente.

Descargable desde el portal de la Biblioteca Regional (enlace al pdf) desde su presentación .

lunes, 4 de mayo de 2009

Peplum, de Blutch

Peplum de Blutch es un cómic realizado en 1997 que Ponent Mon ha tenido el mérito de editar hace unos meses. El protagonista vive aventuras y desgracias en la antigua Roma suplantando a un noble y enamorándose del cuerpo de una bella mujer que encuentra congelada durante su destierro... Historia fragmentaria, irónica y fantasiosa, que se considera inspirada en una interpretación libre del Satiricón, compleja a veces pero que da gusto leer.

viernes, 1 de mayo de 2009

Ediciones integrales de grandes obras: Pasajeros del Viento de Bourgeon, y La Ascensión del Gran Mal, de David B.

Hacer reediciones en un único volumen de obras previamente en varios tiene muchas ventajas. Para el editor es una manera de reactivar la vida comercial de la obra, al ampliar las ventas, llegando a un nuevo público que no compró la versión inicial, o a lectores que llegaron a interesarse por el cómic cuando la historia estaba a medio publicar, y no la pudieron comprar desde su inicio si éste ya no estaba en librería. También el volumen único es muy bueno como regalo, pues un placer para quienes han difrutado un comic es darlo a leer a los amigos, y en un único volumen damos la historia entera, y a un precio más razonable que en la versión en varias entregas. Y más ventajas: las bibliotecas que van incorporando colecciones de cómics pueden ir poniéndose al día con la adquisición de obras clásicas ya no disponibles en su versión inicial.

Todo esto me lo he aplicado a mí mismo, pues estos días he comprado y releído la versión integral en un volumen de La ascensión del gran mal y Los pasajeros del viento. En el primer caso, bajo el título Epiléptico se ha publicado la versión completa de la gran historia de la vivencia de esta enfermedad sufrida por el hermano de David B. Por veinte euros se puede tener reunido y con tapa dura lo que inicialmente en seis volúmenes costaba unos ochenta, aunque la reducción del tamaño reduzca un poco la experiencia de la lectura.

En el caso de Pasajeros del Viento, aunque el precio no es tan asequible, porque la edición en color siempre encarece, la lectura de la versión integral de esta historia, que recordaba dispersa, me ha entretenido la última semana. Aventuras en torno a la esclavitud, barcos negreros, amor, colonialismo.... narrados con mucho
colorido y protagonizado por mujeres que buscan conquistar su libertad.

Una opción editorial más económica para el editor, pero igualmente buena para nuevos lectores, regalos y colecciones bibliotecarias es la reedición conjunta de los comic en sus volúmenes iniciales pero en una caja integradora de toda la obra, para su distribución unitaria: Lo que ha hecho Ponent Mon para nuestro Jiro Taniguchi y sus obras La época de Botchan y La cumbre de los dioses.

Final de Malos tiempos, de Carlos Giménez

El volumen cuarto de Malos tiempos es triste, como toda la historia. Con el final de la Guerra Civil llega el hambre, la tuberculosis, la muerte, la persecución política, la instauración del nacional catolicismo... A las puertas de una posguerra larga y dolorosa. La buena ambientación, el dominio de la época, el realismo y autenticidad de lo que se cuenta, hacen de este cómic una más de las muchas grandes obras de Carlos Giménez. Hace poco se definió un "mendigo de historias" en una gran entrevista en El Público, y efectivamente, es un gran narrador, que acerca la memoria histórica reciente a través de la vida de las personas sencillas. Reconocer a Carlos Giménez con el premio Príncipe de Asturias será muy justo, para él, y también a una generación de autores de tebeos con los que crecimos como lectores y como personas.