Avery's Blues, de Angux y Núria Tamarit, es una bonita historia que aprovecha una variación del tema de Fausto para contarnos la vida errante de un bluesman que quiere ser el mejor aún a costa de hacer lo que cruelmente le pide el diablo.
En este cómic se usa un recurso parecido a otra obra muy distinta,
El escultor de Scott McCloud, pero en la que también el deseo de la genialidad artística lleva a entregar su vida al protagonista.
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Un Fausto rural y otro urbano, uno de lectura ligera y melancólica y el otro, El escultor, más prolijo y frenético. Pero en ambos la búsqueda de la inmortalidad a través de la creación y la memoria se combina con la importancia del
otro que sale al encuentro y que intenta rescatarlos a través de la bondad o el amor.
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